¡¡¡Que nunca les pase!!!

Durísimo: Un hombre denunció que una mujer intentó violarlo

Un hombre denunció que una mujer de unos 45 años lo amenazó con un arma, le robó sus pertenencias y pretendió violarlo en un descampado de la ciudad de Mendoza, pero como no tuvo erección, la atacante se indignó y le gatilló en la cabeza aunque el balazo no salió.
Fuentes de la oficina de Delitos Complejos de los Tribunales provinciales confirmaron que la denuncia fue realizada en las últimas horas por un hombre de unos 45 años, y un fiscal investiga el caso como un "abuso".
Según relató la víctima a los investigadores, el hecho ocurrió anteayer cuando circulaba en su automóvil Renault 11 color gris por calle Boulogne Sur Mer de esta capital, pero al llegar a la altura del Hospital Militar fue sorprendido por una mujer.
El hombre puntualizó que ella lo amenazó con un arma de fuego y se subió a su vehículo. "Seguí papito, ya vas a ver lo que es bueno", señaló que le dijo la delincuente una vez que se sentó a su lado y lo mantenía a a raya apuntándole con una pistola.
De acuerdo con la declaración del denunciante, su inesperada pasajera lo hizo conducir hasta un descampado, donde le dijo ordenó detenerse. Tras ello, le pidió que le entregara el dinero que tenía encima a lo que él accedió por temor a que las cosas pasaran a mayores. Sin embargo -relató- las cosas no terminaron allí que una vez que la mujer guardó su botín en la carera, se subió las polleras, se sacó la bombacha, le exigió que se bajara el pantalón y le espetó: "Ahora vas a ganar el cielo, mi amor", tras lo cual se trepó a horcajadas sobre él, no sin antes anunciarle: "Portate bien porque si no sos boleta mi amor".
El denunciante dijo que mientras le decía "esas cosas", le apuntaba en la cabeza, de modo que "tenía tanto miedo que era imposible que tuviera una erección, lo que indignó a esa mujer".
La curiosa narración del insólito ataque siguió en las dependencias policiales: "Ella me decía 'dale, dale ¿o querés que te mate?'. Yo no sabía cómo hacer para satisfacerla, además era re-fiera y tenía aliento de dragón", puntualizó el atribulado cuyano.
Luego contó que su asaltante, descontrolada y presa de la ira le dio un ultimátum: "Si no cumplís, andá despidiéndote de este mundo" y tras esperar unos segundos y comprobar que sus amenazas era inoficiosas, apretó el gatillo, pero con tal suerte para el hombre, que el tiro no salió.
De inmediato, la mujer saltó hacia el asiento del acompañante y antes de que el conductor del R-11 se recompusiera del susto, se calzó nuevamente sus prendas íntimas, abrió la puerta y echó a correr, perdiéndose en la oscuridad.
"Sentí que la vida volvía al cuerpo así es que arranqué y me fui derecho a casa, donde le conté lo sucedido a mi familia y luego fuimos hasta la Comisaría VI a radicar la denuncia".
Dada la complejidad del hecho de instancia privada y sus confusas situaciones, la causa quedó a cargo del fiscal de Delitos Complejos, Eduardo Martearena.