La maestra le pregunta a Jaimito:
-Si yo digo fui rica, es tiempo pasado, pero si digo soy hermosa, ¿qué es?
-Exceso de imaginación.
Oye niño, ¿cuántos años crees que tengo?
Discúlpeme señor, pero yo sólo sé contar hasta cien.
Jaimito le pregunta a la maestra:
Maestra, ¿usted me castigaría por algo que yo no hice?
Claro que no, Jaimito.
Ahh, pues que bueno, porque yo no hice mis deberes.
- En la clase de Castellano la maestra le pregunta a Jaimito:
- Jaimito, en la oración: "María está disfrutando"...Dónde está el sujeto?
- Muy fácil maestra, ¡Arriba de ella!
La profesora el dice a Jaimito:
-A ver Jaimito, la frase “yo busco novio” ¿Qué tiempo es?
-Tiempo perdido, señorita.
A ver, si te portas bien. Porque cada vez que haces algo malo me sale una cana.
Ahhh, entonces tú debiste haber sido tremenda, porque fíjate como ésta la abuela.
¡Abuela, abuela, abuelita!
Y en ese momento su madre lo escucha y le pregunta:
¿Por qué le dices abuela a la empleada?
Y Jaimito le responde:
Es que papá le dice mamacita.
Resulta que a Jaimito y a toda la clase le mandan a realizar una composición sobre el día de la madre con la expresión: ¡Madre solo hay una!
Pues bien, al día siguiente todos los muchachitos llevan su composición y la maestra dice: A ver Luisito léame su composición.
Luis declama:
Iba yo cabalgando sobre mi potro salvaje que se desboca y mi madre me toma sobre sus brazos y me salva, porque: ¡Madre, solo hay una!
La maestra vuelve y dice:
María léame el tema de su composición.
A lo que María responde:
Las olas en la playa estaban agitadas y me hundí en sus profundidades, de repente la mano salvadora de mi madre me llevó a superficie, porque: ¡Madre solo hay una!
A ver Jaimito, dígame su composición.
Ibamos mi madre y yo por el seco desierto cuando atisbamos unas carpas de un campamento árabe, sedientos nos acercamos a una de las tiendas y entramos. En ella había una nevera la cual abrí y ví una coca cola que quedaba en el fondo y dije:
¡Te embromaste madre, solo hay una!
Le pregunta la profesora a Jaimito:
A ver Jaimito, ¿Qué es un caníbal?
No sé profesora.
A ver, ¿Si te comes a tus padres que eres?
Huérfano, maestra, huérfano.
A ver, les voy a hacer dos preguntas y quien me conteste la primera bien, la segunda ya no la tiene que contestar.
Jaimito, ¿cuántos pelos tiene un caballo?
Tiene 500.588.200 pelos.
Entonces, dice la maestra:
¿Y tú cómo lo sabes?
¡Ah, ya no, ésta es la segunda!
Porque usted señorita, dio tareas para la casa y yo vivo en departamento.
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